XXV Aniversario de la Colegiata Nuestra Señora del Cielo
MESA REDONDA
MARTES 9 DE ABRIL 2019
CASA DIOCESANA
Hermosillo, Sonora - México
HACER TEOLOGÍA DESDE NUESTRO SER FEMENINO
María de Jesús Chávez-Camacho Pedraza
Introducción
Estoy muy contenta de estar aquí con ustedes hoy. Contenta de estar en Hermosillo, contenta de estar este año que es un año jubilar, siendo los 100 años de la llegada de Don Juan Navarrete a Hermosillo como obispo de Sonora. De Sonora al cielo, dijo él, y así fue.
Estoy muy contenta de estar aquí con ustedes hoy. Contenta de estar en Hermosillo, contenta de estar este año que es un año jubilar, siendo los 100 años de la llegada de Don Juan Navarrete a Hermosillo como obispo de Sonora. De Sonora al cielo, dijo él, y así fue.
De mi papá, Armando Chávez Camacho, hermosillense, heredé su amor por su tierra. Él, como periodista y escritor, escribió varios libros. El primer libro que escribió fue una novela: “Cajeme, novela de indios”. Con ella obtuvo el premio estatal del Libro Sonorense. De mi papá también heredé su cariño a Don Juan Navarrete, de quien escribió una biografía: “Juan Navarrete. Un hombre enviado por Dios”.
Me dijeron que los hijos de sonorenses nacidos fuera de Sonora, según la constitución del estado, son Sonorenses. Así que me alegro mucho de estar aquí como sonorense.
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En esta mesa redonda, que es como un trébol de cuatro hojas, a mí me corresponde hablar de hacer teología desde nuestro ser femenino.
Hablaré brevemente;
a) Sobre algunos rasgos del pensamiento del Papa Francisco sobre la teología y la labor del teólogo.
b) Qué es lo que creo que aporta nuestro ser femenino al quehacer teológico.
a. Para luego dar paso a hablar sobre mujeres que desde su experiencia con el Dios de Jesucristo lo han manifestado de palabra y obra.
María y las mujeres que acompañaron a Jesús; las madres del desierto; las mujeres evangelizadoras de México; mujeres del siglo XIX y XX.
Teología
Se ha dicho mucho de lo que es la teología, la teología misma sus diversas ramas… Se ha dicho mucho, se ha escrito mucho. Yo hoy aquí, sólo traigo algunas perlas, de este gran tesoro…
¿Qué decir de lo que es la teología? Según la etimología, Theos significa: Dios y logos: discurso, tratado, o palabra. Se dice que la teología nace como el discurso sobre los dioses, así lo cuenta Platón en su famoso diálogo República, 379 ad.
La discusión versa sobre la necesidad que tiene el Estado de buenos y verdaderos mitos que eduquen correctamente a los jóvenes, de ahí la necesidad de hablar sobre los dioses contando cómo son. Es pues un estudio de las características y propiedades de la divinidad.
Pero dejando a Platón…. vemos que la teología cristiana parte de un ENCUENTRO: del encuentro con Cristo, que revela, a través de su vida, muerte y resurrección el rostro misericordioso de Dios. El Papa Francisco habla de la importancia de este encuentro personal con Jesús. Un encuentro personal – dice - que ha tocado mi corazón y le ha dado una dirección y un sentido nuevos a mi existencia”. (Francisco, “Hablemos de la fe”, Respuesta a R. Scalfari: OR (e) 38 (20-9-2013) 6-7. En Tenace Michelina, Del clavo a la clave. La teología fundamental del Papa Francisco, p. 4)
El 10 de abril de 2014, el Papa Francisco recibe al profesorado de la Pontificia Universidad Gregoriana, de Roma.
En aquella ocasión el Papa Francisco resumió en pocas palabras su visión sobre el cometido de la teología y las características del verdadero teólogo. Señalaré algunos elementos que me parecen esenciales.
Él habla de tres ingredientes de una buena teología:
- El estudio
- El encuentro con la realidad
- La oración
Lo que preocupa al papa Francisco es la concepción de la teología como un cúmulo de nociones, un saber completo y concluido. Una teología encerrada. Una teología de manuales desconectada de la realidad.
Una teología que solo ve la parte académica. Él dice que una teología que no está vinculada a la vida es una ciencia sobre Dios que corre el riesgo de convertirse en ideología.
Insiste que la teología tiene que ofrecer una clave de comprensión vital, tiene que abrirse al mundo, al otro, al dialogo. Una teología de búsqueda de sentido. Una teología en movimiento, incompleta. (Una teología incompleta lo entiendo aquí en el sentido de que se van descubriendo cosas nuevas porque la revelación es inagotable). Y una teología abierta al misterio de Dios…
Dice el Papa Francisco que un teólogo será tanto más fecundo y eficaz cuanto más animado esté por el amor a Cristo y la Iglesia, cuanto más sólida y armoniosa sea la relación entre estudio y oración. No se puede reflexionar sobre Dios con un corazón duro.
Él dice que no se necesitan teólogos que conozcan de memoria la doctrina, pero que no tienen fe. La fe no es nunca abstracta: tiene que ser testimoniada. Y dice también que los teólogos han de ser pioneros, pioneros del diálogo con las culturas. Y como él dice tantas veces, dice que hay que ir a la frontera y no quedarnos en el cuartel.
El papa dice también que la Iglesia necesita una teología que se integra con el empeño misionero, la caridad fraterna y el compartir con los pobres, con el cuidado de la vida interior en la relación con el Señor. La Iglesia tiene necesidad de una atmosfera espiritual de búsqueda. (Tenance Michelina….Introducción, IX-XXI)
La labor del teólogo, de la teóloga
Así pues, tres ingredientes de una buena teología:
- El estudio
- El encuentro con la realidad
- La oración
Una teología vinculada a la vida.
El Papa en el número 103, de la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium: dice que reconoce con gusto cómo las mujeres brindan nuevos aportes a la reflexión teológica.
Nosotras deseamos hacer esta teología desde nuestro ser femenino. Esto sin que se trate de hacer una competencia con los varones sino en la complementariedad que a todos nos enriquece.
Creo que estos nuevos aportes a la reflexión teológica desde nuestro ser femenino están anclados en dos realidades:
1) Somos casa
Las mujeres por fisiología, somos casa, el vientre materno es nuestra primera casa. Y las mujeres, independiente que hayamos sido madre o no, tenemos el cuerpo preparado para serlo.
2) Cuido y acogida
Hay algo en la mujer que se desprende de éste ser casa, que es el cuido. El cuido de las personas, el cuido de la creación.
Cuido que hombres y mujeres juntos estamos llamados a ejercer. Como dice el Papa Francisco en su Encíclica Laudate Si: “Vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios es parte esencial de una existencia virtuosa, no consiste en algo opcional, ni en un aspecto secundario de la experiencia cristiana”. (LS, 217) Cuido que nos toca a todos ejercer, y que a que nosotras nos toca ejercer desde nuestro ser femenino.
Desde nuestro ser femenino, la Colegiata Nuestra Señora del Cielo invita a elaborar y difundir teología. Difundiéndola no sólo a través de libros, conferencias y a través de las redes sociales sino también difundiéndola, manifestándola con la vida. Teología hecha vida. Teología encarnada. Con una fe testimoniada, como dice el Papa Francisco. Manifestando de palabra y de obra, nuestra vivencia de Dios encarnado en Jesús.
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Quisiera ahora compartir con ustedes algunos ejemplos de mujeres que han manifestado su vivencia de Dios de palabra y de obra. Que han hecho un tratado sobre Dios a través de su palabra y su obra. Mujeres de diversas culturas y épocas. Algo así como un ramo hermoso de flores de diversos colores, texturas, aromas.
María y las mujeres acompañaron a Jesús
Cómo no comenzar mencionando a la mujer nazarena que fue cuna, casa y que proporcionó cuido a Jesús: María. Entre las muchas imágenes que me gustan en las que está representada María me gusta en especial en donde vemos a María leyendo las Escrituras, leyendo la Torá.
Meditando la Palabra de Dios. Ella que conservaba cuidadosamente todas las cosas en su corazón, como dice el evangelio de Lucas (3, 51). Teniendo además una presencia activa en medio de los apóstoles después de Pentecostés, en la naciente Iglesia.
Había mujeres que acompañaban a Jesús en su vida pública. Algunas son mencionadas por sus nombres. Le acompañan hasta el final e incluso van luego a la tumba porque querían ungir el cuerpo de Jesús, su maestro y amigo. Cuánto sabían ellas del cuido… Y María Magdalena será enviada por el mismo Jesús para ser apóstola de los apóstoles.
Hablaré ahora de otras mujeres quizás no muy conocidas que manifestaron su experiencia de Dios de palabra y obra.
Las Madres del desierto
Mary Forman, benedictina, escribió un libro hermoso que se titula: “Orar con las madres del desierto”. Mujeres con sabiduría de vida, de los siglos IV y V, que fueron fundadoras de algunas de las primeras comunidades de mujeres. Vivieron como ermitas o en vida comunitaria en los desiertos de Siria y Egipto. Se les conoce como Ammas, término que se utiliza para designar una madre espiritual, equivalente al de abba, nombre que se da al padre espiritual. El nombre de amma no es necesariamente el papel de abadesa o superiora. Mujeres como Melania, Teodora, Sinclética….y otras, daban consejos llenos de sabiduría para la vida espiritual. Se podría decir que eran parteras de la vida espiritual en el sentido de mujeres capaces de escuchar los corazones de quienes las rodeaban de modo que el Espíritu daba a luz a Cristo en el corazón y la vida de estas personas.
(Orar con las madres del desierto, Mary Forman OSB, ed. Mensajero, p. 33 y 26). Por ejemplo Amma María era hermana de Pacomio, padre del desierto. (Soldado romano, convertido al cristianismo) Cuando él funda los cenobios (casas o lugares alejados de la población donde vivían monjes o monjas en comunidad) ella funda cenobios femeninos. Las monjas de Panópolis, en Egipto, eran 400.
Mujeres sabias, portadoras del Espíritu y estudiosas de la Escritura, las ammas del desierto, pusieron sus dones al servicio de los demás. Enamoradas de Dios, del desierto y de la oración, fueron auténticas guías espirituales para todas las personas, hombres y mujeres, que las necesitaban.
Las vidas y sentencias de muchas Madres, fueron célebres en su tiempo debido a la tradición oral. Más tarde, sus apotegmas (frase breve que expresa un pensamiento o enseñanza) fueron recogidos en manuscritos. Estadísticamente, son más las Madres que los Padres, pero son pocas aquellas de las que nos han llegado datos biográficos y doctrina, debido a razones socio-culturales de la época. (ACI Prensa)
Las mujeres evangelizadoras de México
Se conocen muchos datos sobre los primeros evangelizadores de México; franciscanos, dominicos, agustinos, jesuitas y otras comunidades…. Sus vidas son conocidas, las vidas de las primeras evangelizadoras de México va siendo poco a poco más conocida.
Hice un trabajo sobre estas mujeres, en agradecimiento profundo por aquellas que desde España viajaron a la Nueva España para compartir vida y fe. Evangelizadoras con su palabra y vida.
Porque la Iglesia también entonces, necesitaba lo que dice el Papa Francisco: una teología que se integra con el empeño misionero y la caridad fraterna. Mujeres: unas como maestras, anunciado la nueva fe y compartiendo su saber, con la convicción de que la formación era importante también para la mujer, y defendiendo la dignidad de ésta. Otras como monjas y maestras, dando testimonio desde sus conventos. Les menciono aquí algunos nombres: Catalina Bustamante, viuda y asociada a la familia franciscana; la primera maestra en México. Elena Medrano, que llega desde Salamanca. Muchas mujeres recibieron el ejemplo de aquéllas que llegaron de lejanas tierras y decidieron responder al llamado de Cristo. María Magdalena de Lorravaquio, jerónima, nacida en México (1570-1630). Su autobiografía es el primer escrito místico femenino que se conoce producido en la Nueva España.
Mujeres del siglo XIX
Paulina Jaricot
Una mujer seglar francesa, con un llamado interior fuerte a ayudar a los misioneros con oración y ayuda económica. Empezó poco a poco a recoger dinero y a pedir oraciones por los misioneros. Como tantas iniciativas, Paulina comenzó de manera modesta. Su manera de hacerlo fue muy original. Se dirigió a unas mujeres de un grupo de Iglesia que ella conocía y a sus compañeras de trabajo de la fábrica donde trabajaba, haciéndoles una propuesta. Las invitó a dar un céntimo a la semana a favor de las Misiones. Calculando 10 obreras y que cada una de ellas podía invitar a su vez a otras 10 amigas a hacer lo mismo, se llegaba a una colecta de 100 céntimos a la semana.
Estas convertidas en socias de la asociación que se crea, cada una buscaba otras 10 personas que ofrecieran semanalmente la misma suma. La asociación pudo así extenderse rápidamente con millares de personas como miembros. Y con una colecta que aumentaba.
Hoy esta iniciativa se llama: Obra de la Propagación de la Fe. Fundada en Lyón, Francia, en 1822.
Tiene como finalidades principales:
- Informar, sensibilizar y educar en el espíritu misionero, suscitando interés por la evangelización universal.
- Promover, teniendo presente la evangelización del mundo, la ayuda recíproca entre las diferentes Iglesias locales, tanto en el campo espiritual como material.
- La Obra de la Propagación de la Fe, forma parte de las 4 obras misionales pontificias. Propagación de la Fe (la ya mencionada); Infancia Misionera (proyectos de evangelización y solidaridad en favor de los niños de países en misión); San Pedro Apóstol (ayudar a vocaciones surgidas en territorios de misión) (iniciativa de otras mujeres francesas: Juana Bigad y su madre Estefanía); Unión misional (formación misionera para obispos, sacerdotes, religiosos y agentes de pastoral).
Las Obras Misionales Pontificias (OMP) son el principal instrumento de la Iglesia católica para atender las grandes necesidades con las que se encuentran los misioneros en su labor de evangelización por todo el mundo.
Paulina tuvo también otras iniciativas como la de crear las Bibliotecas populares y también trabajó por mejorar la condición obrera.
Mencionaré otra mujer, esta vez de México, nacida en el siglo XIX y que murió en el siglo XX. (1881 - 1974)
Julia Navarrete y Guerrero
Cómo no mencionar en este año Jubilar de Don Juan Navarrete y Guerrero, a su hermana mayor, la venerable Madre Julia. Fundadora, con la inspiración e impulso del Jesuita Alberto Cusco Mir, de la Congregación de Misioneras Hijas de la Purísima Virgen María. Su autobiografía intitulada “Mi camino” manifiesta la hondura de su vivencia e intimidad con Dios uno y Trino. Al leerla descubrimos a una gran mística mexicana del siglo XX. Madre Julia le pasa como a grandes santos. Oyó a un sacerdote de mucha fama que la vida mística sólo la comunicaba Dios a los grandes santos y en muy raros casos. Y se le levantó una borrasca pensando entonces que su vida de unión con Dios sea falsa e ilusoria. Y cuando ella le habla a Jesús, Jesús tranquiliza a Madre Julia diciéndole: “tu vida es fe”, “cree en mi amor”, “cree en mi llamamiento a una vida de unión”. Después de que Jesús le habla así, ella, Madre Julia dice: me siento penetrada de su presencia como si mi alma fuera un sagrario en donde realmente está Jesús. (Mi Camino, 49). Madre Julia sufrió la persecución religiosa, y al interno de la congregación calumnias y destierro. Mujer de gran fortaleza, siguió cuidando a la congregación en los tiempos difíciles. Mujer alegre, sociable y comunicativa; mujer de oración, sabia consejera. Manifestando de palabra y de obra, su vivencia de Dios encarnado en Jesús. Toda su vida fue una fe testimoniada, un tratado de Dios en palabras y obras.
Un último testimonio del siglo XX y que actualmente esta iniciativa cumple 60 años.
La ONG Manos Unidas
Su origen son mujeres de la acción católica. Fruto de su vivencia de Dios, se sintieron llamadas a dar testimonio de amor universal por el género humano; no se resignaron a que el mundo sufriera hambre. Hace 60 años lanzaron la primera campaña contra el hambre a partir de la cual se configuró lo que hoy se conoce como Manos Unidas, la ONG de la Iglesia Católica en España, para apoyar diversas necesidades en los países emergentes.
Trabajan por ejemplo en muchos países, a favor de la mujer. Como en El Salvador que tiene el mayor índice de femicidios de América Latina, según cifras de Manos Unidas. Promueve asociaciones que brindan ayuda a mujeres que desconocen sus derechos y sufren violencia, abusos… Apoya iniciativas de trabajo, granjas de pollos, fabricación de miel…. Apoya la formación de jóvenes para prevención, trabajando por un futuro sin violencia.
Frases finales
Quisiera terminar con una frase de una compañera nuestra de la Colegiata.
Natalia Plá, miembro de la Colegiata hizo una ponencia en el Convento de San Esteban, de los dominicos de Salamanca en España. (Una ponencia en el marco de un homenaje a un sacerdote dominico que obró por restaurar los estudios místicos en España: el Padre Juan González Arintero, dominico). Aunque su ponencia no es específicamente sobre teología, creo que puede aportar una luz a toda esta reflexión. Natalia señala que nada se nos da sino es encarnado. Dice que una espiritualidad encarnada nos hace adquirir la mirada misericordiosa de Dios Padre, la mirada amiga de Jesús, la mirada creativa de Espíritu Santo. Empapados del modo de mirar a Dios, esa mirada nos traspasa y llega, a través de nosotros al mundo. El amor de Dios ha de acariciar a los seres humanos a través de nuestros ojos. Y agrega que una espiritualidad encarnada nos va llevando a transitar de ser creyentes a ser santos.
Creo que estas frases manifiestan lo que puede unirnos hombres y mujeres. Hacer teología, difundir teología desde la fe testimoniada, desde el estudio, desde el encuentro con la realidad y la oración; que menciona el Papa Francisco. Desde el encuentro con el Dios de Jesús, manifestándola en palabra y obra.
Alfredo Rubio decía: “antes hacía cosas con amor; ahora veo que se trata de ser amor que hace cosas; amor y sólo amor”. Este es el llamado común: hacer que nuestro ser se convierta en pura caridad.
Bibliografía
- Chávez-Camacho Pedraza, María de Jesús, Las primeras evangelizadoras de México.
- Compte Grau, María Teresa, Diez cosas que el Papa Francisco propone a las mujeres, Publicaciones Claretianas, 2018.
- Forman Mary OSB, Orar con las Madres del Desierto, Ediciones Mensajero, Bilbao 2007
- Navarrete y Guerrero Julia, Mi Camino: autobiografía de la Sierva de Dios Julia Navarrete, CEVHAC, México 1993.
- Papa Francisco, Laudato Si, Carta Encíclica de S.S. Francisco, San Pablo, Madrid 2015.
- Pla, Natalia, Vivir una espiritualidad encarnada: el reto de nuestro tiempo. Ponencia en el Convento de San Estaban, Salamanca 2011
- Tenace Michelina, Del clavo a la clave. La teología fundamental del Papa Francisco, BAC Popular, Madrid 2018.