FEBRERO 2023


Te regalo mi ausencia 


Un título que no surge de una acción poética, ni menos de alguna actitud de despecho, tan de moda, ni siquiera de una novela.

La traigo aquí como un regalo, y les propongo una mirada obsequiosa ante un término, que, de general, es asociado negativamente. AUSENCIA, que rima con carencia, abandono, pérdida etc.

Según la RAE, es acción y efecto de ausentarse. Jurídicamente incluso, se usa como medida para decretar vida o muerte de alguien según los intereses legales que se necesiten sobre algunos bienes que les interesen a los presentes. Pues este no es el caso ni el motivo de quererles regalar ausencia.

Todo tiene un comienzo y esta historia no podía ser de otra manera. A mis 52 acomodados años y por estudio y gracia de Dios, recibí una invitación con su respectiva beca para estudiar por más de 6 meses fuera de mi país, de mi zona de confort, es decir, cuando digo fuera es Roma, y es cruzar el charco y dejarlo todo. Si bien ya he finalizado buena parte de los estudios, aún quedan unos meses. No he querido estar ausente de mi cotidianidad, que incluyen diferentes espacios de nutrición intelectual y sobre todo espiritual. Bendito Zoom que te permite estar sin estar.

En una de estas nutritivas charlas es que resuena esta frase de boca de una buena amiga que nos hablaba de silencio y cuido. En esa ocasión relató que un compañero de trabajo y buen amigo se tuvo que ausentar, y les dice que “les regala su ausencia”. Frase que me llenó de sentido y gozo. Descubrí que he podido regalar mi ausencia, y que muchas cosas nuevas, diferentes, ni mejores ni peores, han podido surgir de mi ausencia.

Una brisa suave de libertad y liviandad me invadió. Conmovida miro por la pantalla del zoom, y le escribo por whatsapp a quien quedó en Chile, en casa, y le mensajeo “estos meses le he regalado mi ausencia a Chile, a ustedes mis compañeros de camino, a mi familia, a mi trabajo, a mis quehaceres”…  me conmuevo.

Lo pude pronunciar con humildad y sorpresa. En otra época hubiera estado loca, queriendo saber de todo, y si todo funcionó como lo planeé, organicé y agotadores etc.

Estos meses me he regalado mi ausencia de roles, de formas, de ritmos, Me he vaciado de mí, de una forma tal que ya no existe ni existirá más la que fui. Siempre dicen que en los viajes uno parte de una forma y regresa de otra; qué duda cabe… esta aventura no ha terminado y si bien siento el peso de la lejanía, siento la liviandad de haber dejado de ESTAR. 

Agradezco este regalo insospechado y estruendoso en mi interior, de silencio profundo y desapercibido en lo exterior. Disfruto de la levedad que ha sido ir soltando, vaciando para sostener lo importante, conservar lo prioritario, saber lo justo y controlar nada.

Imagen Claudia Tzanis Eissler

No sin dolor he visto también cómo lo que creía firme y duradero, fue arena entre mis dedos, purificando relaciones, proyectos, ideas incluso trabajo. Con alegría rescato los vínculos, los rostros que sostienen y que la distancia física desaparece, que el domicilio no es importante cuando lo que importa es el modo, el mejor modo de tratarnos y cuidarnos.

Qué alegría de SER pudiendo no haber existido, qué alegría estar de una manera nueva, ya que antiguamente me hubiera querido aferrar. Qué alegría de saberme viviendo por pura gratuidad, y así un día desapareceré y no pasará nada, pero gozo el estar aún junto a mis otros tan queridos.  Para finalizar les dejo una canción, traducida del portugués, búsquenla en youtube.


Tocando al frente


Imagen Claudia Tzanis Eissler

Ando despacito porque tuve prisa
y llevo esta sonrisa
porque ya lloré de más.

Hoy me siento más fuerte
más feliz ¿quién sabe?
y llevo la certeza
de que muy poco sé
o nada sé.

Conocer las mañas y las mañanas
un sabor de masas
y de manzanas
se precisa amor para poder latir,
se precisa paz para sonreír,
se precisa lluvia, para vivir,

Siento que sentir la vida
sea simplemente
emprender la marcha
de ir tocando al frente.

Como un viejo arriero va
llevando la manada
y desangrando días
por largos caminos voy,
caminos hoy.

Conocer las mañas y las mañanas
un sabor de masas
y de manzanas
se precisa amor para poder latir,
se precisa paz para sonreír,
se precisa lluvia, para vivir.

Imagen Claudia Tzanis

Todo el mundo ama un día
todo el mundo llora, un día gente llega
y otros te abandonan.

Cada uno busca
componer su historia
y cada ser se cargará
el don de ser capaz
y ser feliz.

Ando despacito porque tuve prisa
y llevo esta sonrisa
porque ya lloré de más.



Hoy me siento más fuerte
más feliz ¿quién sabe?
y llevo la certeza
de que muy poco sé
o nada sé. 

https://www.youtube.com/watch?v=X1M0ZoX1dM8

Canción original en portuguès de Almir Satir y Renato Teixeira


Claudia Tzanis Eissler 

Miembro de la Colegiata Ntra. Sra. del Cielo
Periodista y acompañante psicoespiritual
Roma 

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Meditación


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